Translate

domingo, 21 de agosto de 2022

El Perdido en el Mundo Propio

¿Cuánto Cuesta una Amistad?

Hace alrededor de seis años y fracción, me hice "Amigo Virtual" de una persona que, por mucho, lejos estaba de ser quien decía ser. Nada anormal, es un síndrome acostumbrado en Internet desde que es Internet, al menos en su uso popular, pero no resulta muy cómodo saber que, habiendo sido advertido más de una vez, la influencia de la persona alcanzara a permear su lejana presencia en mi círculo estrecho de amistades (Aka "Los Aldeanos"). Eso me llevó a problemas muy ásperos con ellos hasta que una de mis más cercanas amistades y colega guitarrista, Mónica "Monna" Briseño, me hizo ver lo pernicioso de esa "Amistad" que consiguió incluso sacarnos dinero (confieso). Fue Monna quien puso punto final en cosa de un par de días a algo que yo no conseguía poner fin en años. Sí, mi postura era más indiferente y no lo veía con ojos de que pudiera ser serio hasta que la citada Mónica y mi amigo de años, Iván Arellano, me mostraron con evidencias (y fotos reales traídas desde tierras lejanas) que yo había permitido tal ambiente de discordia entre mi también mencionado círculo al tomar tan a la ligera el daño que se nos estaba haciendo. Al final, en esos días, el equipo estaba conflictuado y dividido. Fue a base de reestablecer lazos y curar heridas morales que logramos volver a ser "Los Aldeanos". Esto dejó de hacer daño hace mucho tiempo pero, mientras lo hizo, provocó que entre nosotros nos hiciéramos mucho daño.

Luego entonces viene una suerte de "Second Part" en esto de los desencantos. A punto de meter la pata, irónicamente la otra "Amistad Desconocida", la del párrafo anterior, hizo que no metiera esa pata al haber aceptado apoyar, políticamente, a un "Amigo de Años" que busca hacerse una carrera. En su libertad está, y no por casualidad pensaba apoyarlo en mis posibilidades intelectuales y mi experiencia como activista de izquierda pero hubo varias personas que me señalaron que no debía hacer tal cosa. Algunos me recordaron un disco grabado que, lento, pero avanza. Otros por su parte me hicieron ver que mi postura es más genuina y no está a la venta. Yo, como los italianos, creo en la palabra y cumplo mi palabra. El honor es antes de todo y eso hace la diferencia entre quienes tenemos la libertad de dar opinión y ser activistas sin ponerle precio a lo que hacemos. Quien pone valor monetario a su pensamiento, carece de valor moral.

Lo intrínseco de las cosas. Visitando el perfil Facebook del amigo de marras (al que pensaba apoyar), me doy de narices con esa "Amistad Desconocida". Claro que no es para ignorar ese detalle. La armonía que como equipo hemos recuperado Los Aldeanos, no se ha levantado nuevamente en tres días, fue todo un proceso, y yo no estoy dispuesto a exponerme a mí ni exponer a los míos en una cruzada en la que habría sido un mero peón (la carrera política del amigo). Le hice la observación y le dije con comas y puntos que: "Personalmente te pediré que elimines a esa persona de tus contactos si vamos a colaborar tú y yo". Muy impositivo yo, cierto, pero se trata de respeto y seriedad. Total, mi amigo me indicó que, por alguna razón, "No podía eliminarla", y que no sabía por qué. Debe ser una gran falta de destreza porque si el amigo piensa que me trago cuentos como ese, insulta mi inteligencia. De hecho debe considerarme un idiota y, no perdón, idiota no soy. Transcurrió un mes después de mi petición y, a los treinta días exactos lo dejé claro vía mensaje:

"Amigo. la persona que te indiqué sigue en tus contactos y yo retiro mi parte. Suerte"

El caballero me indicó que "no tiene tiempo para esas pendejadas", "que no mame" y algunos otros desahogos lo que le valió una respuesta categórica de mi parte:

"Por esta vez pasaré por alto este insulto, merezco más respeto de tu parte y también yo sé hablar en tonos altos. Ni a mí manager ni a mi vieja les permito hablarme así como igual yo no me he dirigido contigo de esta manera. Mi tiempo también merece el mismo respeto que el tuyo y yo traté de dedicarte parte del mío dejándolo claro a todo el mundo. Si te molesta mi insistencia de eliminar de tus contactos a esa persona, discúlpame, para mí es más importante mi gente, y la mujer de marras es alguien con la que no quiero tener siquiera un contacto indirecto. Como consejo, aprende a valorar a la gente que te apoya sin interés."

Para finalizar este tema y cerrar el capítulo quiero decirle al amigo, que no tardará en leer esto, lo siguiente:

Soy (o era) tu amigo, no tu gato ni tu pendejo.

Gracias por leer

No hay comentarios.: